...LA MIA ME DEJO DELANTE DE TODOS EN LA DISCOTECA...

A veces mi cabeza no me soporta y se va un par de días. Ya estoy acostumbrado, aunque sigo teniendo miedo de que no vuelva. (Como el hombre aquel que fue a por tabaco).Últimamente veo que hay mucha gente separada de sus cabezas. Lo veo en sus pupilas, en sus grietas y en la mancha de ron de sus camisas.Aprovechan esos días de soledad para beber más, fumar más...Pero el caso es que casi toda las cabezas vuelven justo en el peor momento, casi siempre cuando vomitas... Te pillan de rodillas, con las manos en el retrete (un manjar de orina y coca para algunas lenguas coquetas) echando a perder el glamour que dicen que tienen lo miércoles. Dejando por los suelos a papá y a mamá.Se te escapa la vergüenza en dos puntas de lágrimas delatando a tu cuerpo que la hechas de menos. Pero ya es demasiado tarde, la cabeza no vuelve, se ha cansado de la relación.

Todo es habituarte -dicen algunos-

Pero debe de dar miedo estar solo en el coche y que nadie te diga "Cuidado vas más de 80Km."o "Esa última copa sobra." Después de la ruptura todo cambia. Tu forma de bailar en la discoteca... Tus excesos... Tus amigos ¿O eres tú?. Te quedas totalmente opaco, no hay rayo inteligente que te atraviese.Pasa el tiempo y llega el momento que ni te acuerdas que una vez tuviste una relación de 23 años... 33... los que sea, con ella. Con tu co-razón.Así que sigues tu vida, esnifando, follando, vomitando, mintiendo...esperando que toquen a la puerta y vuelva lo que decía tu cabeza: "Serás un tí@ grande".