viernes, febrero 09, 2007

CUANDO VAYAS A UNA HELADERIA ESTE VERANO.

Incluso el más valiente cierra la puerta del baño para masturbarse. La niña preciosa que baila, la de los labios gordos y de expresión en clave, se siente sola y débil ante la mirada del cubito de hielo de su zumo de piña, pensando en que nadie la quiere. El más corecto de los comportamientos no siempre es el adecuado, ni todo los helados de chocolate saben igual.
No todas las letras son ritmo y música, ni todos los que leen a diario saben cuánto dura el silencio de un punto. Y no todos los que saltan un muro escapan. Sino que entran.
Los dos bolsillos de los pantalones o chaquetones están para que pierdas el tiempo buscando las llaves .(Hicieron bien los hombres que sacrificaron los brazos por alas, desde el cielo los llamamos aves, ellos no tienen puertas que abrir ni cerrar). Los bocadillos de jamón serrano sirven para que le des un mordisco y te comas lo mejor y se quede el pan, solo, seco y con el café hirviendo.(Como la vida misma) Los coches sirven para poder insultar y pensar que nadie te escucha mientras te mueves por el mundo. Y los silencios de la habitación, de tu mente, de tu soledad, de tus miedos, sirven para que cuando eligas un helado, sea de chocolate y del bueno, para olvidar por un instante que estás en la tierra y vueles como los pajaros.
Y pongas El Punto a ese silencio de duda, que siempre hay justo despúes de cerrar una puerta en el camino de esta puta vida.

3 comentarios:

Vero dijo...

:)

Me ha gustao :)

Toni dijo...

Este es una de esas entradas que recuerdas para siempre. Un 10 camarada.

Anónimo dijo...

Todo muy cierto, y muy bien expresado. Otro 10 de mi parte zanguango.